Este proyecto fue muy bonito, cuesta mucho dar con un cliente que tiene un negocio de toda la vida, y que quiere renovar su imagen para adaptarse a los cambios del día a día, sin perder de vista su clientela de siempre. Un propietario de trato cercano, cuidadoso con los detalles y que se preocupa por estar al día para mejorar un negocio que comenzó su padre y al que vamos a comprar ingredientes para hacer platos que nos enseñaron a preparar en nuestras casas. Esto es lo que significa Frutas Estela y lo que dice su nueva imagen, un logotipo compuesto de ilustración y nombre, ambos de estilos diferentes que junto al color cálido consigue dar imagen de “tradición actualizada”, consiguiendo así ser atractivo tanto para sus clientes de siempre como para los nuevos a quienes intentamos llegar.